Hay mucha crispación en las calles. Todo el mundo se desplaza de la manera incorrecta, todos menos yo. Esa parece ser la máxima. Peatones que se quejan de aceras invadidas por bicicletas; ciclistas que se quejan de carriles biZi(que mola mas, co!) invadidos por peatones y las calzadas por locos domingueros; conductores que se quejan de calzadas invadidas por ciclistas y tranvías; motos que se quejan de que el casco les da calor; abuelos que se quejan, y punto…menos mal que entre tanto alboroto, siempre encontramos un remanso de paz.
Brrrrrrrrrrrrrrrrrruuuum.
Ale...a cuidarse!
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