martes, 19 de abril de 2011

Errores vitales

Todo el mundo comete alguno, de mayor o menor envergadura. Es una pesada losa que le persigue a lo largo de  esta carrera que es la vida. Tras cometerlo, solo quedan dos opciones, dejarte hundir por su peso, o luchar y seguir hacia adelante. No es fácil, pero siempre hay una mano amiga que te ayuda.
Gracias a dios, yo, lo he superado. Cometí el gravísimo error de asociarme el facebus a mi correo principal. Debí crearme otro que lo supliera, pero hotmail volvió al ataque con su herramienta de actualizaciones sociales, permitiendome purgar mi culpa y rescatarlo del olvido. Gracias Bill.

Ale...a cuidarse!


Y venga, temazo al canto

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